En el organismo masculino se producen altos niveles de testosterona, hormona cuya función tiene que ver con las características sexuales y la reproducción. En mujeres, esta sustancia también se produce, pero en niveles mucho más bajos. Lamentablemente, existen estudios que demuestran que a lo largo de los años han descendido los niveles de testosterona en la población general. Como consecuencia, esto trae efectos negativos como la pérdida de libido, disfunción eréctil y bajo estado de ánimo.
¿Qué es la Testosterona?
La testosterona es una hormona sexual; de tipo esteroidea, por lo que es necesaria para una buena salud sexual. Ésta participa en el desarrollo de las características sexuales primarias y secundarias, así como en el mantenimiento del deseo sexual y la reproducción. En los hombres, esta sustancia es producida por los testículos; mientras que en las mujeres es secretada por los ovarios. Aunque la testosterona ha sido asociada, principalmente, a rasgos masculinos, las mujeres también producen testosterona, aunque en cantidades diez veces más bajas que los hombres.
Esencialmente, mantener niveles óptimos de testosterona; tanto en hombres como en mujeres, indica una adecuada salud endocrina y aporta muchos beneficios para el estilo de vida. Por ejemplo, el desempeño en el deporte y la fuerza es resultado de contar con una buena cantidad de testosterona, así como el rendimiento y el deseo sexual. A partir de los 30 años, la producción de testosterona en el cuerpo humano comienza a descender y, a los 70 años, deja de generarse por completo. Como efectos, es palpable un aumento en la depresión, fatiga e inhibición en el ámbito de la sexualidad.
Lamentablemente, cada vez se presenta mayor número de hombres jóvenes con deficiencias de testosterona, cuando lo esperable es que esta descienda en la mitad de la adultez. Esta complicación se debe a factores referentes a un estilo de vida poco saludable. Por ejemplo, la falta de descanso, la mala alimentación, el no saber regular el estrés, los sentimientos de tristeza o el sedentarismo son variables que intervienen en la pérdida de testosterona.
Los niveles de Testosterona descienden cada vez más
Tal como hemos mencionado, los bajos niveles de testosterona traen efectos negativos como la pérdida de libido, disfunción eréctil, poca energía, bajo estado de ánimo; así como problemas de concentración y memoria. Una falta de testosterona en el organismo puede generarse por circunstancias naturales, relacionadas con el envejecimiento del sujeto o por factores externos, asociados a un estilo de vida poco saludable.
Siguiendo este hilo de ideas, en los últimos 50 años, los científicos se han percatado de cambios alarmantes en la salud reproductiva de humanos y animales. Así, se han hecho estudios que prueban que cada año disminuye el conteo de espermatozoides y aumenta el cáncer testicular en la población general. Tales efectos provienen de un descenso en los niveles de testosterona, los cuales tienen que ver con la contaminación en el agua y los alimentos que consumimos. De esta manera, las diversas sustancias utilizadas por las grandes empresas alimenticias cuentan con pesticidas y componentes estrogénicos que producen baja testosterona.
Siendo la testosterona el más importante esteroide producido cada día en el organismo de un hombre adulto, la industria farmacéutica ha diseñado diversas medicinas que prometen mejorar los niveles de testosterona. No obstante, como efectos secundarios de este tipo de fármacos podemos destacar la retención de sodio, cambios lipídicos, alteraciones de la función hepática e ictericia por reacción de hipersensibilidad.
¿Cómo aumentar la Testosterona de forma natural?
Tal como se ha sostenido en este artículo, la testosterona no es, por sí misma, una sustancia indispensable para vivir. Aun así, el descenso anormal de esta hormona en el organismo conlleva a diversas complicaciones de salud. Por tal motivo, se recomienda mantener rutinas diarias saludables y equilibradas. De este modo, cada sujeto debe responsabilizarse de adquirir buenos hábitos de sueño y alimentación, mantenerse activos, así como aprender a regular sus propias emociones.
Además de lo ya mencionado, existen ciertas plantas y alimentos en la naturaleza que tienen un alto potencial de aumento de testosterona en el humano. De acuerdo con el libro “Remedios naturales para aumentar la testosterona” de Stephen Harrod, el pino es la planta con mayor grado de testosterona, especialmente el polen de este árbol. Por tal motivo, el polen de pino es especialmente útil para retrasar problemas de andropausia, como la disfunción eréctil.
Alimentos que ayudan a incrementar el nivel de Testosterona
Existen ciertos alimentos que se ha demostrado que ayudan a mejorar los niveles de testosterona en el cuerpo:
- Ostras: Ricas en zinc, las ostras pueden aumentar la testosterona y la producción de esperma. El zinc es crucial para la producción de testosterona, y una deficiencia de este mineral puede llevar a una disminución de los niveles hormonales.
- Granos de avena: Contienen una sustancia llamada L-arginina, un aminoácido que se ha demostrado que aumenta los niveles de óxido nítrico en la sangre, lo cual puede ayudar a aumentar el flujo sanguíneo y, potencialmente, la producción de testosterona.
- Granadas: Algunos estudios sugieren que el jugo de granada puede aumentar los niveles de testosterona tanto en hombres como en mujeres. Las granadas son también ricas en antioxidantes, lo que puede ayudar a mejorar la salud general y promover la producción de testosterona.
- Vegetales crucíferos: Alimentos como el brócoli, la col rizada, el coliflor y las coles de Bruselas contienen diindolilmetano (DIM), una sustancia que puede ayudar al cuerpo a metabolizar el estrógeno de manera más eficiente, potencialmente aumentando los niveles de testosterona al reducir los niveles de estrógeno.
- Carnes magras, pollo y pescado: Estos alimentos son ricos en proteínas, lo que puede ayudar en la construcción muscular y el mantenimiento de niveles saludables de testosterona. Además, el pescado rico en ácidos grasos omega-3, como el salmón y las sardinas, puede promover la salud general, lo cual es beneficioso para la producción de hormonas.
- Huevos: Son una excelente fuente de vitamina D, colesterol, proteína y ácidos grasos omega-3, todos importantes para la producción de testosterona. La vitamina D, en particular, ha sido vinculada con niveles más altos de testosterona.
- Aguacates: Ricos en grasas saludables, los aguacates pueden promover la salud general y hormonal. Contienen vitaminas E y B6 que son cruciales para la producción de testosterona y la regulación de este nivel hormonal.
También, es posible mencionar otros remedios cuyo consumo es eficiente para el aumento de testosterona. Por ejemplo, el alga nori mantiene la salud del sistema urinario, el alga conocida como kelp también aporta a beneficios a nivel prostático y del organismo en general. Y el sargazo es otro tipo de alga cuyo consumo mantiene el deseo y el rendimiento sexual.
Además, alimentos como el palmito y la granada son conocidos por mantener un buen riego sanguíneo en la zona prostática y favorecer a la producción de testosterona. Por último, la suplementación con yodo promueve la salud prostática y del tracto urinario. Como conclusión se sugiere tomar en cuenta las recomendaciones generales sobre el mantenimiento de un estilo de vida saludable, así como el consumo de alimentos y plantas que favorezcan el bienestar de la próstata.
Referencias
- Harrod, S. (2017). Remedios naturales para aumentar la testosterona: Cómo mejorar la salud sexual y la energía masculina. Simon and Schuster.
- González, A. (2018). Nutrición y testosterona: Alimentos para mejorar tu salud hormonal. Madrid: Editorial Salud.
- Gil, M., Martínez, J. M. (2010). Síndrome de déficit de testosterona y disfunción eréctil. https://scielo.isciii.es/pdf/urol/v63n8/12.pdf
- Prostadine. (2022). Scientists Discover The Real Root Cause Of Prostate Problems. Extraído de: https://prostadine24.com/text.php
- Tejada, A. (2013). La actitud y la Testosterona, la hormona del estilo de vida. Horizonte Médico, vol. 13, núm. 2. Extraído de: https://www.redalyc.org/pdf/3716/371637129007.pdf
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Publicado: March 29, 2024 at 01:14AM
