Los 3 factores que más aceleran el envejecimiento del cerebro, según la ciencia – MUNDO DEPORTIVO

Existen ciertos factores de riesgo que producen un envejecimiento acelerado en el cerebro y ayudan a la aparición de enfermedades degenerativas como la demencia.

La genética, la edad, enfermedades como la diabetes, la obesidad o la hipertensión, y los malos hábitos como el sedentarismo, consumir alcohol y fumar son algunas de las causas que afectan las neuronas.

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Sin embargo, un nuevo estudio llevado a cabo por la Universidad de Oxford y publicado en Nature Communications identificó tres grandes factores de riesgo específicos y para esto se centró en las regiones más débiles del cerebro, que son vulnerables a la enfermedad de Alzheimer y la esquizofrenia.

De acuerdo a los científicos de Oxford, las personas tienen un punto débil en este órgano que reside en el interior del cráneo. Se trata de regiones específicas que muestran un deterioro más temprano en la vejez.

Según Gwenaëlle Douaud, profesora asociada de la universidad británica y coautora de la investigación: “Estas conexiones ayudan al cerebro a procesar e integrar trozos de información a través de diferentes modalidades, a través de diferentes sentidos”. Y explica: “Son las primeras en desaparecer cuando empezamos a envejecer”.

En este sentido, el estudio investigó cuáles son los factores que afectan estas regiones y aumentan el riesgo de padecer demencia o enfermedades neurológicas. 

Para llegar a los resultados, los expertos examinaron los escáneres cerebrales de 40.000 personas adultas británicas de entre 44 y 82 años.

Finalmente, el estudio examinó 161 factores de riesgo modificables, como el colesterol, la tensión arterial, el peso, la diabetes, el consumo de alcohol y tabaco, el estado de ánimo, la inflamación, la dieta, la actividad física, la audición, la contaminación, el sueño, la socialización y la educación.

Sin embargo, los resultados del estudio arrojó que las principales causas de demencia más perjudiciales son las siguientes: la diabetes, la contaminación atmosférica y el consumo de alcohol.

Por lo tanto, cada una de ellas posee un efecto que duplica el de los demás factores de riesgo principales. Los otros factores de riesgo más importantes son el sueño, el peso, el tabaquismo y la tensión arterial.

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En cuanto a la diabetes, la contaminación atmosférica y el consumo de alcohol causan procesos inflamatorios cronificados, estrés oxidativo neuronal y daño en el sistema vascular del cerebro, lo que aumenta, no sólo el deterioro cognitivo y la posibilidad de sufrir demencia, sino también padecer accidentes cerebrovasculares isquémicos (por falta de oxígeno) o hemorrágicos.

Si bien en la actualidad aún no existe un tratamiento para curar las demencias neurodegenerativas, que son las que ocurren cuando las células del cerebro dejan de funcionar o mueren, diferentes estudios señalan que los cambios de conducta y de hábitos podrían prevenir su aparición. 

A continuación, te contamos qué hacer para cuidar la salud cerebral y retrasar su deterioro:

• Realizar ejercicio físico: este hábito saludable ayuda a prevenir el sobrepeso y la obesidad y, también, los accidentes cerebrovasculares y la presión arterial alta.

• Ejercitar la mente: ejercicios fáciles como leer, practicar juegos de mesa, hacer manualidades, aprender una nueva habilidad contribuyen a mantener la mente activa.

• Pasar tiempo con familiares y amigos: reunirse con otras personas y realizar actividades sociales previene el aislamiento social, que está relacionado con mayores riesgos de deterioro cognitivo.

• Dormir bien: una de las funciones del sueño es eliminar y reciclar las toxinas del cerebro, entre ellas, una proteína llamada beta amiloide que se depura activamente mientras se duerme y previene la enfermedad de Alzheimer.

• Dejar de fumar: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un 14% de los casos anuales de demencia a nivel mundial puede atribuirse al hábito de fumar.

• Limitar el consumo de alcohol: la ingesta de bebidas alcohólicas influye en la presión arterial alta, los accidentes cerebrovasculares y la pérdida de memoria.

• Evitar la obesidad: la obesidad es un factor de riesgo para el desarrollo de diabetes, que a su vez esta enfermedad aumenta las probabilidades de padecer deterioro cognitivo.

• Controlar la presión arterial: la hipertensión aumenta el riesgo de accidente cerebrovascular y demencia vascular.

• Regular los niveles de azúcar en la sangre: los niveles altos de glucosa sanguínea pueden provocar diabetes, uno de los factores más importantes en el desarrollo de la demencia.